Despertarse, desayunar, vestirse, mochila al hombro y al cole. Todos los padres y madres sabemos que la rutina es la clave para que el día a día de nuestros peques vaya sobre ruedas.
¿Pues sabes qué? Con la piel atópica ocurre exactamente lo mismo. Cuidados diarios, naturales y, sobre todo, llenos de amor. Porque ese es el verdadero secreto para mantener la piel atópica de nuestros pequeños, feliz y saludable.
Así que, hemos preparado este artículo pensando en ti, para guiarte en la creación de una rutina diaria que será el mejor amigo de su piel atópica.
Te aseguramos que no habrá complicaciones, solo consejos prácticos y fáciles de integrar en vuestra rutina diaria.
¡Vamos allá!
La importancia de una rutina natural y sencilla para la piel atópica en niños
¿Sabías que la piel atópica afecta a un tercio de los niños menores de 10 años?1 Y es que su barrera cutánea es más delgada y sensible que la de los mayores, por lo que es más propensa a afecciones. Por suerte, al crecer, la mayoría de los casos remiten.
Así que se trata de encontrar una solución que alivie sus síntomas durante estos años: enrojecimiento, descamación, picor y aparición de pequeñas erupciones cutáneas.
Y es que el rasca-que-te-rasca puede ser muy molestos para ellos, causando incomodidad y afectando su calidad de vida. Por suerte, tenemos el poder de brindarles una rutina diaria de cuidado suave, fácil y natural.
Pero ojo, cuando hablamos de rutina, no nos referimos a algo aburrido y repetitivo. ¡Todo lo contrario! Es un momento especial para mimar su piel y fortalecer nuestro vínculo.
Además, podemos convertir esta rutina en un juego divertido y educativo, enseñándoles desde bien peques cómo la constancia y el orden consiguen grandes resultados.
Aquí tienes nuestros consejos, trucos y secretos para establecer una rutina que sea pan comido.
Rutina natural, diaria y cariñosa para pieles atópicas infantiles
Cada maestrillo tiene su librillo, pero esta es nuestra propuesta:
Al despertar
Lo primero es comprobar si durante la noche se ha rascado. Si es así, tranquilízale con el poder calmante de un emoliente como Little Miracles. Aplica suavemente en las zonas afectadas y deja que sus ingredientes orgánicos hagan su trabajo.
Al vestirle
El objetivo número uno es evitar que suden. Por eso en invierno, es importante no vestirles como una cebolla, incluso si hace mucho frío. En verano, opta por telas frescas y ligeras como el lino o la seda.
¿Nuestro favoritísimo? Elige siempre el algodón orgánico para las prendas que estén en contacto con su piel.
En el cole
No olvides que el jabón de manos estándar puede desproteger la barrera hidrolipídica de su piel. Mete en su mochila un limpiador específico, suave y sin ingredientes agresivos. Así mantendrás su piel protegida y feliz durante todo el día.
En el parque
¡Es hora de protegerse del sol! En días soleados, asegúrate de proporcionarle una protección solar adecuada. Utiliza filtros minerales y viste a tu hijo o hija con ropa protectora para que los rayos solares no irriten su piel. El sol es bueno para la piel atópica, pero con protección.
Al volver a casa
Crea un hogar templado y cómodo. Evita abusar de la calefacción en invierno y el aire acondicionado en verano. Mantén una temperatura agradable y utiliza un humidificador para mantener la humedad adecuada (en torno al 40%) en el ambiente.
En la ducha
Recuerda que los productos irritantes como champús, geles o suavizantes pueden desencadenar brotes. Elige cuidadosamente los productos adecuados: limpiadores suaves, sin jabón y formulados con un pH adecuado.
Lava su piel con cariño y utiliza agua tibia a máximo 34 grados. Después, seca su piel con toallas de algodón premium, dando suaves golpecitos en lugar de frotar.
Después de la ducha
La hidratación diaria es el mejor remedio para la piel atópica. Por eso, aunque no haya brotes, es importante cuidar y nutrir su piel todos los días.
El ratito de después de la ducha, con la piel limpia y fresca, es el mejor momento para hidratar. De hecho, es el momento elegido por el 71% de los padres y madres para aplicar Little Miracles.
Aplica la crema por todo el cuerpo y cara, y aprovecha el tiempo para mimarle con un suave masaje mientras hablas con tu peque, se convertirá en su momento favorito del día.
En la cena
Fomenta una dieta equilibrada y saludable que incluya alimentos ricos en nutrientes y vitaminas para promover la salud de su piel. Además, asegúrate de que se mantenga hidratado durante todo el día, animando a tu hijo o hija a beber suficiente agua.
Antes de ir a dormir
Este es un momento delicado, ya que los picores pueden poner muy nervioso al niño o niña.
Para ayudarle a relajarse, impregna su almohada con un olor calmante como la lavanda. Lee un cuento con una luz tenue y, si está sufriendo un brote, vuelve a aplicar Little Miracles con un suave masaje que le invite al sueño.
Incluso puedes colocar guantes o calcetines suaves en sus manos para evitar que se rasque sin querer durante la noche.
Little Miracles, tu ayuda diaria para la piel atópica infantil
Siguiendo esta rutina completa, formaréis una patrulla fantástica para cuidar la piel atópica de tu hijo o hija. Recuerda que si, a pesar de estos cuidados, la piel de tu pequeño no mejora, siempre puedes consultar con un pediatra para obtener más asesoramiento.
Además, no olvides que Little Miracles es una crema hidratante y calmante especialmente formulada para tratar los síntomas de la dermatitis atópica. Con ingredientes naturales y orgánicos, ayuda a reducir el picor y la irritación sin contraindicaciones.
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Referencias:
[1] Infosalus . «¿Por qué cada vez es más frecuente la piel atópica en niños? Cuidados básicos de cara al buen tiempo», en «Una piel para toda la vida. La Guía definitiva para mantenerla sana y joven» (Espasa). Consultado el 7 de mayo de 2021.
